Falsa política verde

Imagen: paperblog

En Michoacán habrá elecciones en noviembre y las campañas ya están a todo lo que dan; en lo personal, siempre me ha molestado la forma en que los candidatos consiguen sumar votos; las estrategias siempre se me han hecho aburridas, poco creativas y lejanas al ciudadano común.

Salvo que seas acarreado o activista de uno de los partidos políticos difícilmente estarás presente en un mitin; la posibilidad de pertenecer a un grupo que se pueda sentar a charlal con el candidato sobre sus propuestas de campaña versus las necesidades del pueblo son remotas y finalmente, en los cientos de papelitos que recibirás en un semáforo o que verás pegados en los postes de luz no encontrarás ni las propuestas ni la filosofía del candidato.

Todo esto ya es común para nosotros pero en los últimos tiempos sucede algo que me molesta aún más y es que los candidatos vendan propuestas "verdes" y promesas de ciudades sustentables cuando su campaña indica a gritos que al candidato eso de la vida sustentable y minimalista le importa muy poco.

En esta ocasión he analizado las estrategias de campaña de los tres candidatos al Gobierno de Michoacán y he encontrado con asombro, tristeza e indignación que su política verde es más falsa que un billete de siete pesos.


Iniciamos por Silvano Aureoles del PRD, PT y Convergencia. El Ing. Aureoles en su página de Internet promete "Desarrollo Ambiental Sustentable" a través de siete líneas de trabajo: políticas públicas, manejo de áreas naturales, adecuada gestión municipal de residuos sólidos, ordenamiento territorial, pago por servicios ambientales, combate de tala clandestina y promoción de la cultura del cuidado medioambiental. Y aquí es donde yo me pregunto ¿el candidato Aureoles piensa que repartir miles de volantes, trípticos, panfletos y banderitas es congruente con una cultura de cuidado medioambiental?; ¿será que ya tiene todo un plan de manejo de esos residuos para cada municipio donde repartió su propaganda y el cuál echará a andar independientemente de si gana o no?

Fausto Vallejo candidato del PRI y del Parido Verde Ecologista de México (PVEM) sí que se ha volado la barda pues siendo candidato del PVEM (el cual en su página de Internet para Michoacán incluye hasta tips ecológicos) la responsabilidad de ser coherente con el cuidado del medio ambiente era mucho mayor y no bastándole las toneladas de papel invertido en carteles, panfletos, volantes y demás el candidato ha decidido utilizar los servicios de la empresa Publimex en la peor de sus modalidades: anuncios espectaculares montados sobre vehículos.


Ahora los que vivimos en Morelia tenemos que esperar con paciencia el caos que provoca el desfile de campaña de Fausto Vallejo: al menos cinco vehículos con publicidad móvil, dos camionetas tipo Suburban adornadas con carteles y dos autos convertibles que llevan a lindas señoritas con globos rojos; el resultado: tráfico, más emisiones de CO2 y sobretodo el mensaje claro para los ciudadanos que sacar carros a pasear sin que su fin sea transportarnos de un lugar a otro está bien. ¿Qué esperanza puede haber entonces de que Morelia le apueste a ser una ciudad libre de autos, al uso de la bici y del transporte público si el candidato a Gobernador y quien fuera cuatro veces Presidente Municipal no le ha quedado muy claro esto de la sustentabilidad?


Lo que ha hecho Cocoa Calderón, candidata del PAN y Nueva Alianza, no se si está peor o se salva por sincera; por supuesto que también reparte banderitas, propaganda y papel más papel pero en los 20 puntos que integran su propuesta de gobierno no hay ni uno solo que hable del cuidado medioambiental, se salva de la incongruencia pero se condena por la ausencia.


Ojalá los candidatos dejaran de tirar papel a la basura, de contaminar visualmente las ciudades con tanto anuncio y por supuesto de usar vehículos exclusivamente para publicitarse. Ojalá se asesoraran adecuadamente en temas de sustentabilidad, ecología, medioambiente para que fueran congruentes y además entendieran la importancia del desarrollo sustentable para la economía y la sociedad. Ojalá se decidieran a hacer política color verde pasto y no verde cemento como la que han hecho hasta ahora.

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