El agua ligera que te mueve y cuida de ti

Foto: JosEnrique / supernova.gdl.mx
"El agua ligera", "Eso que te mueve", Cuida de ti", algunos de las más conocidas frases con las que las embotelladoras de agua purificada nos han convencido a todos los mexicanos de que no hay nada más sano en el mundo que beber agua como camello en oasis.


¡Y vaya que les hemos hecho caso! De acuerdo al reporte de la consultoría Beverage Marketing Corporation presentado en 2010, México es el país que más agua embotellada consume en el mundo: 13% de las ventas mundiales de este vital líquido con su respectiva botellita se hacen en nuestro país, cada mexicano consume 234 litros al año de agua embotellada lo que significa 26 millones de litros al año y lo que traducido a pesos y centavos significa un gasto promedio por familia de $1,800/año.



Este jugoso mercado del agua embotellada representa 32,000 millones de pesos al año los cuales en teoría se reparten entre 3 mil marcas de agua embotellada pero la realidad es que casi todo se queda en manos de cuatro monstruos corporativos: Danone (Evian y Bonafont), Nestlé (Pureza Vital y Santa María), PepsiCo. (E-pura y Santorini) y por supuesto Coca-Cola (Ciel).


Por un metro cúbico de agua de la llave, es decir mil litros, pagamos entre 8 y 11 pesos; por un metro cúbico de agua embotellada pagamos hasta 10 mil pesos (!!!). Al final del día pagamos, y muy caro, nuestro derecho al agua limpia. El problema está en que parece que no hay escapatoria pues pocos se atreven a beber agua de la llave. 


De acuerdo a información de la CNA sólo el 6% del agua superficial en México está libre de cualquier clase de contaminante; el agua que irá a parar a nuestros grifos requiere un riguroso procesos de purificación; sin embargo, nuestras ciudades no son ni siquiera capaces de efectuar una desinfección con cloro al 100%. Según datos de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) el 91.7% del agua "potable" en México está clorada pero esta es una cifra nacional; la realidad en los estados es otra: en Michoacán sólo el 77% del agua se desinfecta y en Chiapas esta cifra apenas alcanza el 64%.


Es tanta la desconfianza en los sistemas de agua potable que nuestros propios legisladores consumen en el recinto de San Lázaro 2 millones de pesos al año en agua embotellada ¿no les convendría más poner su propia plantita purificadora?


La afectación económica de las masas a la par del enriquecimiento de unos cuantos es sólo una de las aristas de este problema; tenemos también una alerta de salud pública y por supuesto un caos ambiental generado por las toneladas de envases de agua que diario son arrojados a la basura.


En México cada año 8,000 millones de botellas de agua van a dar a la basura, sólo el 20% se recicla; si a esto le sumamos el consumo masivo de refrescos al final tenemos 71 millones de envases plásticos viajando cada día hacia los depósitos de basura en el mejor de los casos y hacia las alcantarillas cuando su destino es el de vagabundear.


Reducir el consumo de agua embotellada es urgente y desde esta trinchera les cuento que gracias a la Revista del Consumidor de Mayo de 2011 he comprobado algo que ya me sospechaba: eso de tener que tomar 2 litros de agua al día para ser sanos y felices no es más que un mito creado e impulsado por la mercadotecnia de las embotelladoras.


Un estudio realizado en la Universidad de Medicina de Dartmouth, en Estados Unidos indica que no existen pruebas fiables de que la ingestión de dos litros de agua diarios tenga un beneficio específico para la salud. El propio cuerpo humano es capaz de mantener por sí mismo el equilibrio de agua necesario para el buen funcionamiento del organismo. Los alimentos y otras bebidas, como el café, también aportan agua que no suele computarse como agua bebida. Es decir, el agua que debes beber es la que tu propia sed te indica, lo otro puede convertirse incluso en un desorden alimenticio originado por el deseo de ser delgado y cuyo nombre es "potomanía".


Hay que beber el agua necesaria, hay que rellenar envases, hay que exigir agua limpia , hay que instalar filtros en casa, hay que exigir bebedores de agua potable al menos en escuelas y parques, hay que buscar una forma de ayudar urgentemente.


Y como hoy ya me extendí mucho cierro esto con una cita que me he permitido tomar de la página de "El Poder del Consumidor" y que pertenece Claudia Campero, de Food and Water Watch y de Blue Planet Project:
"Es la obligación de los gobiernos dar acceso al agua, y que ésta sea potable y económicamente accesible. Cuando la gente se ve en la necesidad de comprar agua embotellada, claramente no se está garantizando el derecho humano al agua"


Infórmate más:
El mito de tomar 2 litros de agua al día por Sergio Parra
El negocio del agua purificada en México
"Agua embotellada: entre la ecología y el ahorro" en la Revista del Consumidor, Núm. 411, Mayo de 2011
La Potomanía, un trastorno desconocido en Eroski


Y no dejes de ver The story of Bottled Water con Annie Leonard

Comentarios

  1. Q onda Sofía!

    Excelente síntesis para exponer este mito, buenos datos y referencias, interesante!

    Tienes previsto el reestablecimiento de algún congreso sobre ciudades sustentable? saludos!!

    ResponderBorrar
  2. Gracias por tu comentario. Por el momento no tenemos planeado retomar lo del Congreso a menos de que alguna Universidad, Institución o Gobierno quiera financiarlo; de lo contrario es muy difícil.

    ResponderBorrar
  3. Gracias por este artículo Sofía, me siento comprendida porque, viviendo en Chiapas, necesito agua embotellada hasta para lavar la fruta. Hay aquí constantes epidemias de tifoidea por contaminación del agua con heces fecales y, bueno, todavía nos hablan a todos los "chiapanecos" de parte del gobernador para ponernos al tanto de los progresos de nuestro Estado. (Le deseo sus tifoideas al gobernador)
    Y una anécdota, hoy chistosa, de la que me acordé con tu artículo. Cuando fui a Francia por primera vez pregunté en el hotel si el agua del baño era potable y sólo me dijeron ¿de qué país viene? ¡Qué oso!

    ResponderBorrar
  4. Saludos Sofía.
    Me parece super importante que expongas este tema. No tenía idea de que México fuera el mayor consumidor de agua embotellada en el mundo, sin embargo no me extraña en lo más mínimo.
    Creo que la cultura de agua que existe en nuestro país es mínima. Podemos ver publicidad en la calle diciendo "Cuida el agua" etc... pero ¿cómo puede la ciudadanía cuidar del agua?.

    Otra de las cosas que encuentro incoherentes es como los organismos dedicados a gestión de agua son muy buenos para gastar $100,000,000 (cienmil millones de dólares) en una sola infraestructura para captación de agua (como las presas) pero son totalmente incapaces mejor de gastar $1000 dólares en 10 mil lugares para hacer techos y recolectar agua de lluvia.

    En fin muy interesante
    Saludos!!!

    ResponderBorrar

Publicar un comentario